Hoy Leila y la eterna Mandy Bright van a darse una orgía en un sucio almacén, ataviadas en sus trajes de látex y luciendo sus espectaculares piernas enfundadas en medias de seda, dejan sobarse y lamerse por dos ladrones. Se lo hacen muy bien por lo que ellas agradecidas empiezan a comérsela a los dos y a mr. Freeman que asiste al espectáculo atado a una columna excitado y dispuesto a echarle un polvazo a la que se le ponga a tiro en cuánto lo liberen, cosa que sucede con Leila. Mientras, Mandy se encarga de los dos ladrones que le hacen un DP para oír sus gemidos de perrita exagerada tras lo cual se lleva un par de lefazos en la cara, lefazos que comparte luego con Leila que ya se había llevado el suyo antes con el hombre desatado.
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