Christine Blonde acaba de tener una averia en el motor de su viejo coche. Afortunadamente en ese momento pasa una banda de moteros con sus choppers y su chupas de cuero dispuestos a ayudarla, eso sí a cambio de un gangbang, algo para lo que Christine se siente plenamente capacitada pues es una guarra de nivel Maribel. Así que ahí la vemos rodeada de siete rabos comiendo a todos lados y encajando pollas a diestro y siniestro, por el coño, por la vagina y hasta dos a la vez en dobles penetraciones para las que los chicos se turnan sin disputa hasta por fin correrse todos, uno detrás de otro en su cara en un bukkake que hará las delicias de los más pervertidos…y de Christine, por supuesto que después de disfrutar como una perra se da cuenta que esa banda de malhechores se ha aprovechado de ella y encima no le habían arreglado nada.

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