La espectacular Simone Shine acude casi cada día a la piscina de su gimnasio para hacer unos largos, hoy se ha encontrado allí a un hombre apuesto y musculoso, Marco Banderas, que ese día andaba por Budapest en un rodaje y aprovechó un momento de asueto para ir a nadar. Así que al verse, enseguida saltaron chispas y en un santiamén Marco ya estaba comiéndole el coño a Simone que, cómo no, respondió con una buena mamada, lo que ella llama su carta de presentación, tras lo cual pasaron ya a un buen metesaca en que podemos ver la escultural figura de Simone botando salvajemente o puesta a cuatro patas encajando la tranca de Marco en el ojal hasta recibir una buena descarga de semen en la cara, tras lo cual Simone estaba más mojada que si se hubiera bañado en el río de Heráclito.
+ -