¿Te imaginas estar enfermo y tener a una enfermera como Gwen Cortez? Pues ahora imagina que viene tu amigo a visitarte y se la folla delante tuyo... Sí, exacto, te daría un infarto directamente. Esto es lo que le pasa a nuestro pobre enfermo que se queda con las ganas al ver el cuerpazo que se encuentra detrás del uniforme de esta tremenda rubia. Su amigo la seduce de tal forma que la tía no tarda en agacharse y chuparle la polla, examinando cada rincón con su boca. El tío la desnuda, la pone encima de la camilla justamente al lado de su pobre amigo y le empieza a comer ese chochete mojado y hambriento de carne. La enfermera pide a gritos que le inspeccionen todos los orificios de su cuerpo y así se lo conceden. Le bombean el culo mientras ella se toca y gime como una guarrindonga. Luego acaba la faena como solo ella sabe, con una buena mamada y saboreando la leche natural. Seguro que nuestro amigo enfermo casi revienta el electrocardiógrafo.

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