Después de un asunto algo turbio Silvia Lancome vuelve con su marido (Max Cortés) para comentar la jugada, estirada en el sofá habla desnfadada mientras nos muestra su culazo y para celebrar el éxito del negocio que llevan entre manos deciden echar un buen polvo. Qué suerte poder ver a esta musa como si no hubiese pasado el tiempo, comiendo con la maestría que solo ella tenía y gimiendo como una perrita cuando le comen el coño y se la follan, exhibiendo una vez más su espectacular culazo que a la que se descuide tendrá una polla dentro percutiendo y haciéndole disfrutar del sexo anal como la que más y pronto dispuesta a recibir un lefazo en el rostro, el rostro de una de las grandes chicas Private.
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