Masha es una preciosa colegiala que hoy acude al seminario de literatura rusa a ver a su profesor para que le aclare algunas dudas sobre el tema de las bajas pasiones de Ana Karenina con el príncipe Vronski reflejadas en la novela homónima de Tolstoi, no entiende como una mujer madura y de posición puede enamorarse de alguien tan joven, algo que el profesor enseguida le explica diciéndole, mira Masha siéntate en ese sofá y verás, me atraes mucho y te follaría aquí mismo ¿Lo entiendes ahora? A lo que ella sorprendida le responde ¿De qué hablamos de la novela o de nosotros? ¡De las dos cosas! ¿Lo pillas? Y vaya si lo pilla, empieza a comérsela y en nada está abierta de patas sobre la mesa luciendo tetazas y con una polla percutiendo primero en el coño y luego en el ojal hasta por fin llevarse un tarro de las esencias del maestro sobre sus peras olvidando el trágico final de la novela.
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